Día 1: España - Calgary
Vuelo vía capital europea o del este de Canadá (Montreal o Toronto). Recuerden que para volar a Canadá es necesario disponer del permiso de vuelo eTA. Llegada al aeropuerto de Calgary, generalmente por la tarde. Una vez recogido el vehículo en el propio aeropuerto, se trasladan hacia el centro de la ciudad, donde se encuentra su hotel. Tiempo libre para pasear, relajarse del largo viaje. Sugerimos probar alguno de los excelentes restaurantes de carne (steakhouse) de Calgary (les recomendamos alguno en la documentación del viaje): la carne de Alberta se considera la de mayor calidad en Canadá. Noche en Calgary.
Nota: existe la posibilidad de pasar esta primera noche en Banff en lugar de Calgary. Banff está a 130 km del aeropuerto. Es la capital del parque y del esquí en las Rocosas canadienses, con 6500 habitantes y más de 200 tiendas y restaurantes.
Día 2: Calgary - Banff - Lake Louise (aprox. 150 km)
Seguramente se despertarán pronto, a causa de la diferencia horaria (la diferencia horaria entre Calgary y España es de 8 horas). Salen del hotel y en dirección al oeste por la Transcanadiense, se dirigen hacia el parque nacional de Banff. En poco más de una hora pasarán el control de entrada (dispondrán del pase anual a los Parques Nacionales de Canadá, incluido en el precio del viaje), y poco después, llegarán a Banff. Se impone una visita al pueblo de Banff. Población turística, centro del parque, no se pierdan la cueva que fue el origen de la construcción de los primeros baños termales a partir de los cuales se creó, a principios del siglo XX, el primer Parque Nacional de Canadá. También les aconsejamos pasar por el centro de visitantes, donde, si desean realizar excursiones a pie, les podrán aconsejar acerca de las más aptas a sus gustos y deseos.
Una vez dejado atrás el pueblo de Banff, pueden salir hacia el cercano lago de Minnewanka. Desde allí, y en dirección norte, siguiendo la carretera que discurre por el valle del río Bow, pueden acercarse hasta el cañón de Johnston (les recomendamos como mínimo subir hasta la primera cascada… y si se ven con ánimos ¡hasta la segunda!). Finalmente llegarán a Lake Louise. Después de instalarse en el hotel, acerquense al lago, del cual muchos opinan que es la postal por excelencia de las Rocosas canadienses.
Noche en Lake Louise.
Día 3: Lake Louise (aprox. 100 km)
Siguiendo con nuestras sugerencias, hoy pueden empezar la jornada con un paseo matinal, tan temprano como les sea posible, alrededor del lago Louise. Seguidamente, con el coche se desplazan hasta el cercano lago Moraine. A continuación, se dirigen hacia el Parque Nacional de Yoho, situado justo a la entrada de la Columbia Británica. Allí no se pueden perder las cascadas Takakaw (no duden en acercarse tanto como les sea posible, se mojaran, pero vale la pena), los puentes naturales y el lago Esmeralda (nuestro preferido a la hora de realizar una actividad imprescindible en Canadá: ir en canoa).
Regreso a Lake Louise, donde pasarán la noche.
Día 4: Lake Louise - Jasper (aprox. 275 km)
Sin duda una larga e intensa jornada. Hoy se dirigen hacia el norte, en dirección al Parque Nacional de Jasper. Tenemos muchos lugares en los que parar, poco a poco se alejan de los lugares más concurridos, y la sensación de entrar y estar en el Canadá es más intensa. Se pueden hacer paradas para caminar (con diferentes niveles de dificultad y esfuerzo). Desde nuestro punto de vista, recomendamos parar (como mínimo) en el glaciar Crowfort, el lago Peyto y el cañón de Mistaya. Seguidamente, tras cruzar el río Saskatchewan, accederan al Parque de Jasper, y siguiendo por el valle, llegarán al centro de interpretación de los campos de hielo de Colúmbia: se trata de una inmensa masa de hielo, sobre las montañas, de la que “cuelgan” 9 glaciares..., y a uno de ellos podrán subir con el Ice Explorer, una especie de autobús con ruedas de tractor. Está incluida en el viaje, así que a abrigarse, ¡allí arriba acostumbra a hacer frío de verdad!
Siguiendo la ruta hacia Jasper, encontrarán dos puntos de visita obligatoria: las cascadas de Sunwapta y las del río Atabasca. Finalmente, llegarán a Jasper, donde se alojarán.
Día 5: Jasper (aprox. 100 km)
Desayuno y salida hasta el lago Maligne. Pasarán junto al lago Medicina (quizás lleno de agua, quizás vacio), y al llegar al Maligne, se dirigen a recoger sus tickets para la excursión en barco hasta Spirit Island. A su regreso de la excursión, pueden pasear junto al lago, o incluso alquilar una barca. De regreso a Jasper, también pueden parar en el cañón del mismo nombre de Maligne, en la misma carretera. Por la tarde, sugiero se dirijan a la zona de Mt Edith Cavell. Se sube por una carretera estrecha y con curvas, siguiendo el valle del Tonquin. Una vez arriba, podran disfrutar del glaciar del Angel, y buenas opciones de senderismo. Otra buena opción para esta tarde es el teleférico de Jasper (góndola). Las vistas son preciosas, y hay opciones de andar más allá del mirador principal. Atención, allí arriba puede hacer frio.
Finalmente, pueden dedicar la tarde a pasear por el pueblo de Jasper, francamente agradable.
Alojamiento en Jasper.
Día 6: Jasper - Kamloops (aprox. 480 km)
Hoy saldréis de Jasper, y atrás quedaran los Parques nacionales... pero no los grandes paisajes! En primer lugar, seguiréis una carretera hacia el oeste, la llamada "Highway 16". Enseguida os hallaréis en la Columbia Británica, provincia en la que realizaréis el resto de vuestro itinerario. En los 100 Km. que recorreréis en esta dirección, pasaréis junto al Parque provincial del Mt. Robson: haced una parada en el centro del Parque (para ver, si tenéis suerte, la cumbre más alta de las Rocosas canadienses) o en el Moose Lake.
Dejad la "Highway 16" para dirigiros hacia el sur.. Grandes rectas entre anchos valles os conducirán hasta Blue River, lugar en el que os sugerimos que hagáis una nueva parada, especialmente los amantes del rafting. Continuad vuestra ruta, siguiendo por una espectacular carretera que bordea lagos y montañas del Parque provincial de Wells Gray. En esta ruta también tenéis la oportunidad de deteneros en cualquiera de las tiendas de antigüedades ( o más bien de objetos antiguos) que tienen un cierto encanto.
Finalmente llegaréis a Kamloops. Se trata de una pequeña ciudad, con un agradable centro por el que pasear e ir a cenar a uno de sus restaurantes o terrazas.
Alojamiento en Kamloops.
Día 7: Frontera de los Estados Unidos - North Cascades - Winthrop (555 km)
Desayuno y salida de Kamloops hacia la frontera con los Estados Unidos. Toman la nueva autopista 5, que a través de paisajes de montaña, practicamente dehabitadas y con oco tráfico, les llevará hasta Hope. En ese punto de la ruta el tráfico se va haciendo lentamente más denso, hasta que lleguen a Abbotsford, el límite de la área metropolitana del gran Vancouver. Por suerte, estan ya muy cerca de la frontera, y puden desviarse hacia el sur, en unos pocos kilómetros encontrarán la linea divisoria entre ambos paises.
Pasar la frontera puede durar hasta un par de horas, dependiendo del tráfico y de trámites buroc`´aticos (de los que les informaremos en dosier del viaje). Ja estan en los Estados Unidos, y más en concreto, en el estado de Washington. Siguen hacia el sur, y al cabo de una hora aproximadamente, giran hacia el este (izquierda en este caso), para dirigirse al parque nacional de North Cascades. Algunos hablan de este parque como los Alpes de los Estados Unidos. Tiene gran parte de su territorio como área protegida, ideal para los que buscan naturaleza pura y dura. Tan sólo una carretera atraviesa el parque, la que les permitirá contemplar las diferentes zonas destacadas. A la salida del parque, habrán pasado un par de puertos de montaña, de modo que se encuentran en la vertiente este de esta sierra: aquí llueve esporádicamente, y el paisaje verde que habían disfrutado hasta este momento se diluye en praderas y zonas más áridas. No les falta mucho para llegar a Winthrop, el punto final de esta larga jornada, un poueblo pequeño y animado.
Día 8: Seattle
Hoy su ruta les llevará hacia la gran ciudad. La carretera atraviesa numerosos pueblos, sugerimos una breve parada en Leavenworth: una réplica de un pueblo de Baviera, algo surrealista. Seguiu y en un parell d'horas sereu a Seattle. Se dirigen hacia su céntrico hotel, por las numerosas autopistas y rondas de la ciudad. No se asusten: Seattle tiene muchas zonas para recorrer a pie, un importante paseo marítimo, mercados plagados de flores y pescado (prueben el salmón...), y calles llenas de vida. Es en esta ciudad donde tienen sus orígenes Microsoft, la música de Nirvana, y los cafés Starbucks, entre otros.
Día 9: Seattle
Día completo en Seattle para visitar la ciudad.
Día 10: Mount Rainier
Salida temprano de la ciudad, en poco más de un par de horas llegaréis a la entrada del parque nacional del Mount Rainier. Personalmente, uno de los que más me gustan,...¡y sobre gustos no hay nada escrito!
El parque gira alrededor de la cumbre del volcán apagado del mismo nombre, pero que va mucho más allá de la montaña en si. Para que me entiendan, en mi más reciente visita a este parque en el verano de 2011, el Mount Rainier estaba totalmente rodeado por las nubes, y no era visible. Y sin lugar a dudas, seguí disfrutando, una vez más, de la visita de este parque: glaciares, bosques de cedros, cascadas, panorámicas infinitas, paseos cortos e intensos o largas caminatas. Ya lo ven, les recomiendo vivamente visitar el Mount Rainier, y con un poco de suerte si el día está despejado...
Salida del parque y noche en el pequeño pueblo de Ahsford, al suroeste del Mt Rainier.
Día 11: Lake Quinnault - Parque Nacional de Olympic
Ruta hacia el oeste hasta llegar al parque nacional de Olympic. Desde mi punto de vista, consta de tres parques en uno. El parque incluye la mayor parte de la península de Olimpia, al oeste de Seattle. Este lugar contiene una cordillera con picos de más de 2000 metros de altura, perpetuamente nevados, otra zona de bosques lluviosos templados, donde se pueden encontrar algunos de los ejemplares de árboles más altos del mundo, y finalmente, una costa plagada de playas infinitas con fuertes mareas y tempestades (sobretodo en invierno). En resumen, todo un mundo de naturaleza infinita para disfrutar de ella.
Llegarán
- al parque por la zona del lago Quinault, para más adelante ir hasta las playas de Kalaloch, donde tienen el aojamiento. Sin duda les sugiero que dejen para el final del día alguna de las playas de Kalaloch y que contemplen la puesta de sol desde la costa del Pacífico.
Día 12: Port Angeles
Día completo en el parque de Olympic: bosques lluviosos, paseo por sus playas solitarias, el lago Crescent... Posiblemente a primera hora de la tarde llegarán
- a Port Angeles, de modo que disponen de tiempo para subir hasta Hurricaine Ridge, desde donde se puede contemplar tanto la cordillera de Olympic como la llanura norte de la península... y si la niebla lo permite, el sur de la isla de Vancouver.
Port Angeles es un pequeño pueblo pero bastante animado que tiene en el ferry hacia Victoria, en Canadá, su principal motor económico.
Día 13: Victoria
Tomaran el ferry a Victoria por la mañana, la travesía dura cerca de una hora y media. PAsaran la frontera al llegar, y estarán
- de nuevo en Canadá. Tendran el día completo para visitar esta pequeña ciudad, capital de la Columbia Británica. No olviden los jardines Butchard, una delicia. Noche en Victoria.
Día 14: Victoria - Vancouver. (aprox. 300 km)
Salida hacia el norte de Victoria, donde está el puerto de los ferrys que les llevaran a Vancouver. En 1 hora y 45 minutos, llegarán
- al puerto del sur de Vancouver.
Desde allí, en poco más de media hora (si el tráfico no lo impide), podréis estar en el centro de la ciudad y llegar a vuestro hotel. Una vez instalados, podéis salir a disfrutar de una de las ciudades más interesantes que conocemos. Con una gran parte de su población de origen oriental (coreanos, chinos, japoneses) y del resto de los rincones del Planeta, conservando un estilo británico, hay dos elementos que distinguen a Vancouver: el hecho de ser una ciudad que podemos conocer a pie, y el alto grado de civismo de todos sus habitantes.
Que hacer y/o ver en Vancouver? Pasear por Robson street, ir en bicicleta por Stanley Park, el mercado de Granville Island, el viejo Gastown, cruzar el puente Capilano (excepto los que tengáis vértigo como el que os escribe estas líneas), comer buen salmón, disfrutar de una puesta de sol en la Bahía de los Ingleses…. Y mucho más!
Alojamiento en Vancouver.
Día 15: Vancouver
Día completo en Vancouver, para poder disfrutar de lo que ya os hemos explicado, y mucho más. Un detalle: si acabáis agotados, no os preocupéis, acostumbra a ser normal cuando te pasas el día caminando de un lado para otro por los rincones de esta ciudad.
Alojamiento a Vancouver.
Día 16: Vancouver
Por la mañana, os despedís de Vancouver y del oeste canadiense. Entrega de vuestro coche de alquiler en el aeropuerto y después de facturar vuestro equipaje, hacia el avión. Vuelo de regreso a casa o conexión con la siguiente parte de vuestro viaje por el oeste de Canadá.
Día 17: España
Llegada a España.